Desde
que Carlos... Carlos Martínez Sarasola partiu, meu coração está em
desassossego. Seu legado é muito amplo, generoso, amoroso e ele se foi em plena
ebulição do seu gênio e grande sensibilidade. Parecia um jovem com seus 69
anos! Tantos planos em prol dos povos originários do seu país, da América Latina.
Inclusive, conversávamos muito de iniciar/intensificar uma ponte entre Argentina
e Brasil.
Nossa
amizade – dada à sua generosidade e amor, convidou-me a ser um correspondente
para o Diário El Orejiverde que ele concebeu e conduzia. Diário escrito por
dezenas de amigos seus, todos reconhecidos por suas lutas e buscas de um mundo
melhor, os quais promulgam – “Um mundo onde
caibam todos” no dizer los zapatistas!
Com
esta saudade que sinto e meus familiares, orbito a me perguntar como a sentem os
familiares e amigos de Carlos e entre os Mapuche que o chamavam Colilonko
(Cabeça Colorada) ou Colinao (Jaguar Colorado), ou simplesmente, um irmão muito
amado por “Los índios nuestros paisanos”,
título de um dos seus livros mais lidos e que está na lista dos mais
importantes acerca da temática indígena na Argentina e continente de latino-americano?!
O
legado de Carlos deve prosseguir com seu coração e coração de jaguar colorido,
fulgurante. Ainda mais agora na dimensão da eternidade em que ele é uma estrela
de raio intenso nos auxilie com nossos ancestrais e sob a Bondade do Grande Espírito
– nossos projetos e ações na Terra Mãe até nosso reencontro na definitiva
Terras Sem Males/Bem Viver/Bien Vivir/Yby Marã Eyma/Sumak Kawsay!
Abaixo,
convido-te a ler o que foi enviado ao El Orejiverde pela Comunidade Lof Vicente
Catrunao Pincén:
¿Qué estrella fuiste a buscar Hermano querido?
Los Hermanos de la Comunidad Vicente Catrunao Pincén
despiden a Colilonko/Colinao
El sábado 11 de noviembre de 2017 Colilonko (Cabeza Colorada) / Colinao
(Jaguar Colorado), como lo llamamos, escribía algunas confesiones: “me siento
como un pato” decía, haciendo referencia al personaje de una película al que lo
invadía un profundo desasosiego al estar en un lugar que no era su lugar, ya
que no podría participar en el Nguillatún (Ceremonia Ancestral) que se
realizaría en Chorriaca, Neuquén.
Hacía ya 18 años, que cada noviembre, participaba en éste y, cada mes de
abril, en el de Huncal, provincia del Neuquén.
Confesaba que el Nguillatún de noviembre era, particularmente importante
para él porque desde el 2010 había sido autorizado a purrucar, a bailar la
danza del Choique Purrún, una distinción muy trascendente para aquellos hombres
que han reunido las condiciones que les permiten ser purrufe, un danzante.
Cabe señalar que Colilonko / Colinao ha sido el único winka (hombre
blanco) solo, que ha purrucado en un Nguillatún, ya que aquel hombre blanco,
que tiene compañera indígena, obtiene el derecho a purrucar.
Nuestro Hermano había aprendido la importancia de un tiempo distinto.
Simplemente había aprendido.
Además de ser un miembro más de la Comunidad Lof Vicente Catrunao Pincén
era, en ella, miembro del Consejo y Werken (Vocero / Mensajero) de la Región
CABA.
Enseñaba a todos, en la Comunidad, con el buen ejemplo, con el buen
hacer, con el buen decir, con el buen sentir… Colilonko/Colinao es ese “abrazo
infinito” que caracterizó y caracteriza a nuestra Comunidad. Es esa sonrisa
amplia y ese amor genuino por esta familia que lo hizo propio, y a la que él
hizo propia.
El 29 de mayo de 2018 su corazón dejó de latir, y hoy late en el
nuestro, porque somos una sola alma… por siempre.
A nuestro Hermano Colilonko / Colinao también se lo conoce como Carlos
Martínez Sarasola, Licenciado en Antropología, especializado en Estudios
Indígenas, autor, docente.
Desde esa estrella, la más brillante, nos iluminará.
Sabemos que nos encontraremos en el próximo Nguillatún.
¡ Pewkallal Lamngen !
Por Comunidad Lof Vicente Catrunao Pincén
Fecha: 4/6/2018
Disponível em: http://www.elorejiverde.com/el-don-de-la-palabra/4269-que-estrella-fuiste-a-buscar-hermano-querido
Acesso em: 04.06.2018.
